viernes, 2 de mayo de 2014

Lorca "murió cerca de su pueblo" y Machado "se fue a vivir a Francia": todos los criminales intentan borrar las huellas de sus delitos

"Poco después de terminar su última obra de teatro, "La casa de Bernarda Alba", Federico murió cerca de su pueblo durante la guerra en España"

"Pasados unos años, se fue a vivir a Francia con su familia" (sobre Machado)

Así cuenta, o más bien oculta, la editorial  Anaya el fusilamiento de Federico García Lorca y el exilio de Antonio Machado en su libro de texto de Lengua para el primer ciclo de Primaria.
No dicen nada de que Lorca no murió, fue asesinado por los fascistas que dieron un golpe de estado contra el gobierno legítimo de España en la madrugada del 20 de agosto de 1936, al inicio de la Guerra Civil, y aún no se han encontrado sus restos. Tampoco que Antonio Machado huyó de la bestia fascista que impuso durante cuatro décadas una dictadura sanguinaria en España, y cuyo régimen actual es su herencia sin solución de continuidad.

Por eso, el empeño de los herederos de sus asesinos por borrar su pasado criminal es tenaz, y por eso hay que seguir luchando por que siga viva la verdad y por que los criminales que fusilaron a Lorca y a tantos miles de españoles, los que obligaron a exiliarse a otros tantos, encerraron en las cárceles a muchos otros y provocaron y siguen permitiendo que el estado español sea hoy un gran cementerio de fosas comunes, paguen sus crímenes.


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