Ha sido publicado un nuevo estudio que demuestra que la brecha salarial
sigue aumentando en España; es decir, que el peso de la crisis
económica no se reparte de manera homogénea sobre los hombros de todos,
sino que cae, aunque algunos miembros del gobierno digan lo contrario aunque algunos miembros del gobierno digan lo contrario , sobre los de los trabajadores, mientras la élite política y empresarial sigue llenando sus bolsillos a costa de estos.
Según el estudio, publicado por El País
, el sueldo de los directivos de las grandes empresas ha aumentado un
7% en 2013 mientras que los salarios de quienes ellos denominan ''mandos
intermedios'' y ''grueso de los empleados'' siguen en caída (alrededor
de un 3,8%).
El estudio realiza también una retrospectiva y señala que desde 2007
(año de inicio de la crisis) los salarios de los directivos no han
parado de crecer (salvo un pequeño receso en 2009) Concretamente la
media salarial de estos era de 68.705 € en 2007 y cerraron el 2013 con
un salario medio de 80.330 €. Por el contrario, de nuevo, el salario del
resto de empleados ha ido en descenso.
En cuanto a sectores el estudio revela que los directivos de la banca
han pasado de ser los mejores pagados en 2007 a perder un puesto en
2013. Descenso poco significativo si tenemos en cuenta los miles de
millones que el Estado ha regalado a los grandes bancos con dinero
público.
Los autores, que por supuesto son siervos de instituciones capitalistas,
analizan los datos concluyendo que el control de los salarios no seria
una buena solución. Sin embargo, el estudio demuestra que la idea básica
del sistema, que los capitalistas arriesgan mas y por eso se justifican
sus privilegios, es falsa, porque también en periodos de crisis estos
siguen ganando dinero a espuertas a costa de las vueltas de tuerca para
aumentar la explotación de los trabajadores. Queda demostrado que la
crisis la pagan los trabajadores y que, mientras tanto, los empresarios
siguen llenándose los bolsillos.
Por último, el estudio demuestra también que los propios defensores de
la barbarie capitalista no pueden dejar de admitir que este genera
desigualdades y que, además, no existe forma de solucionarlas; es decir,
salvo la que ni siquiera contemplan: la destrucción total del sistema.
HACE FALTA UNA LIMPIEZA
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