BOICOT A ISRAEL
Las movilizaciones contra Israel, y en
apoyo de un “Palestina Libre” se extiende por todos los rincones de
nuestro país. Ayer tuve ocasión de participar en una manifestación en
Palencia, que cruzó de punta a punta la calle Mayor, una via emblemática y con mucha historia.
Unos niños mudos, del mundo
“desarrollado”, observan con indiferencia el paso de una protesta que
exige el fin de una guerra desigual y cruel, que está costando la vida a
cientos de menores de edad, indefensos, que no entienden por qué son
bombardeados por la sola circunstancia de haber nacido sin libertad en
la franja de Gaza.
Pero hay niños y niñas que son capaces de encabezar una manifestación, paar exigir que se ponga fin al genocidio que está teniendo lugar en Palestina, un país sin derechos, sin libertad, sin reconocimiento de su existencia, y abandonado a su suerte por las grandes potencias, que apoyan activamente su exterminio.
“Viva Palestina Libre”, y abajo la
represión. Y para presionar, se hace necesario un boicot a las empresas
extranjeras que apoyan a Israel, que solo piensan en sus intereses
económicos, y que fomenta la riqueza de un país que se dedica a
asesinar a seres indefensos. Es insoportable permitir por más tiempo
que continúe el exterminio de un pueblo. Tal parece que los judios
imitan ahora los métodos que Hitler utilizó para su exterminio;
paradógico pero cierto.
La protesta continúa, y no cesará hasta que se reconozcan los derechos del pueblo palestino, que no piden otra cosa que disfrutar de lo que tienen los demás: un país, unas fronteras, su propia libertad, una dignidad como pueblo. No es mucho pedir.
Por Fernando de Silva en la categoría Conflicto palestino, Franja de Gaza, Genocidio
No hay comentarios:
Publicar un comentario