Para la sociedad de occidente, oriente medio queda muy lejos. Sin
embargo, históricamente no es ese el caso para los dignatarios
occidentales y sus jefes de Estado o imperio.
Por poner solo algunos ejemplos, Gran Bretaña invadió y tomó el
control de Afganistan mucho antes de que la maquinaría propagandística
nos sacara a Rambo en el cine, en dos ocasiones 1839 -1842 y 1879
-1919. En Bahrain lo hizo en 1880–1961, 1961–1971. El mandato de
ocupación británica de Mesopotamia se dio entre 1920–1932, ya en el
2003–2004 tras el conflicto en Irak también mantuvo una ocupación
parcial. En Baluchistan entre 1877 y 1947. En Palestina la ocupación
británica duró desde1920 a 1948. En Siria de 1941 a 1946. En
Transjordania, hoy conocida como Jordania la ocupación del mandato
británico se inició en 1920 hasta 1928 pese a que el control militar y
de las finanzas
se extendería más. Los Estados de la Tregua que se refieren a lo
actuales territorios de los Emiratos Árabes Unidos también fue una
colonia británica.
El 16 de mayo de 1916, surgiría un acuerdo secreto (hoy ya no) entre
Gran Bretaña y Francia para repartirse Oriente medio con escuadra y
cartabón. Durante los dos años que siguieron al final de la primera
guerra mundial y debido a esos acuerdos (Acuerdos Sykes-Picot), los
británicos ocuparon la provincia otomana de Mesopotamia que finalmente
se transformaría en un Mandato británico —en el actual Irak, la región
palestina y la actual Jordania y franceses terminarían controlando los
actuales territorios de Siria y Líbano.
Obviamente, todo esto ocurrió mucho antes de que cualquier
descerebrado descargara cargadores de fusiles de asalto en Europa
matando a gente inocente y después se inmolara pensando en un supuesto
paraíso lleno de riquezas, manjares y prostitutas vírgenes al cual según
cree accede de la misma manera que cualquier sectario religioso es
capaz de quitarse la vida en suicidios colectivos para encontrarse con
su dios. Dioses que tienen cuenta bancaria.
Las consecuencias de esa implementación de dominación imperial
occidental en Oriente medio(especialmente europea en primera instancia a
manos de Gran Bretaña y Francia) han sido, y no ninguna otra cosa, la
máxima responsable de asentar el terreno de conflictividad y problemas
de territorialidad hasta hoy vigentes en ese escenario.
La guerra occidental contra Irak en realidad no inició nada. Sino que
fue el seguimiento de la segunda oleada de imperialismo de nuevo tipo,
ya con EEUU a la cabeza, que ha llevado a destripar diferentes pueblos
que previamente habían estado bajo mandato occidental de los mismos que
atacan ahora con los mismos intereses de siempre. Económicos y
geo-estratégicos. No existía ningún tipo de “terrorismo internacional
islamista” ni tampoco armas de destrucción masiva en el inicio de la
ocupación imperialista colonial ni en su seguimiento. La novedad en la
región se llama Israel que es el que amablemente sustituyó la ocupación
británica de Palestina con el apoyo de sus antiguos colonizadores.
A la hora de tener control de esta situación conflictiva y de
acuerdo con los intereses económicos de la oligarquía europea y
estadounidense se potenció la guerra en Siria, se destrozó Libia e Irak,
se ocupó Afganistan … en una estrategia premeditada de caos ordenado
mediante guerras provocadas e incentivadas. Uno de los elementos en el
terreno de juego ha sido la creación, financiación, formación militar y
entrenamiento de células armadas ya aliadas de occidente en la antigua
guerra de Afganistan en el contexto político de la guerra fría dando
paso después a un tipo concreto de mercenariado. Es de ahí y no de
ninguna otra parte donde se debe ubicar el origen del fenómeno moderno
del yihadismo actual con base ideológica de la oligarquía de países como
Arabia Saudi. Un elemento usado con insistencia por occidente cuando la
situación lo reclamaba y dependiendo de la confluencia de intereses
del mercenariado vuelto contra lo que hizo posible su existencia y
expansión.
¿A dónde va el petroleo de las zonas ocupadas por el estado
islámico?. ¿De dónde vienen y a dónde van las armas que usa el estado
islámico?. ¿Quién se beneficia del asedio militar del estado islámico en
el Kurdistan?. Las respuestas a estas preguntas y a muchas más que se
podrían hacer son estados que están condenando fuertemente la matanza de
París. Incluido el estado francés. Y una aclaración previa a estas
respuestas es tener constancia que la gran mayoría de víctimas del
estado islámico son musulmanes.
Hay una vieja frase que dice así: Ni guerra entre pueblos ni paz
entre clases. Hasta que el imperialismo no abandone definitivamente el
tablero de la geo-estrategia internacional y mientras las clases
burguesas no dejen de privilegiarse de esta situación no habrá justicia
en este mundo que avanza por la espiral de un odio de laboratorio.
Mientras la clase política vasca reza por París, las guerras
imperialistas no caen del cielo.Trident Juncture es el nombre que han
dado a un entrenamiento masivo y simulación de guerra de la OTAN en la
que participan 30 países imperialistas incluido el estado español. Estas
maniobras militares, que no se realizaban de tan gran magnitud desde
hace décadas, entre otros lugares se llevan a cabo en la misma Euskal
Herria. En las Bardenas.
Así es, mientras que en Euskal Herria la indignación ante el drama de
los refugiados se hace notar y la consternación por los muertos en
París, en la propia Euskal Herria se preparan nuevas guerras
imperialistas que generarán más refugiados en el futuro, y quién sabe
qué más, y las empresas vascas de armamento no son ajenas a ello.La
industria militar “vasca” emplea a unas 3.000 personas y vende armamento
por millones de euros anuales. Un negocio en alza. Estas empresas
armamentísticas ubicadas en Euskal Herria reciben ingentes subvenciones
por parte de las administraciones públicas. Las instituciones vascas y
empresas armamentísticas tienen una estrecha colaboración con el
ejercito de Israel. No es ningún misterio aunque intenten que pase
desapercibido.Por ejemplo SENER colabora con la empresa israelí de
armamento Rafael; y ha diseñado los sensores que van en los aviones
militares israelís que atacan a la población civil en Gaza; estos
sensores sirven para localizar y focalizar el objetivo a bombardear.
Mientras que la burguesía europea al calor de los hechos
despreciables acaecidos en París desde la hipocresía mas descarnada se
intenta blindar con banderitas francesas y olvidos selectivos y toda su
maquinaria propagandística actua políticamente en los beneficios que
produce su imperialismo (ya que las consecuencias siempre las pagan de
una u otra forma la clase trabajadora de aquí o de allá), la única
opción para poder optar a una sociedad vasca digna es la inmediata
expulsión de la OTAN de nuestro país, la desestructuración de la
industria militar de la burguesía vasca, la salida del estado francés de
la parte norte de nuestro país, el reconocimiento de la
autodeterminación de todas las naciones del mundo como base única de
entendimiento , la solidaridad de clase con todas las clases
trabajadoras del mundo y el finiquito de los privilegios burgueses que
en el fondo es el basurero y origen de todo conflicto.
Posiblemente están presentando evidencias creíbles de que los ataques de París fueron ataques terroristas reales. Sin embargo, ¿qué ganan los refugiados con los actos de violencia cometidos contra el país anfitrión, y dónde pueden obtener los refugiados en Francia armas automáticas y bombas? y ¿dónde las obtienen los mismos franceses?
ResponderEliminarLos millones de refugiados de las guerras de Washington que están huyendo en masa hacia Europa están trayendo al primer plano de la política europea a los partidos anti-UE, ultra nacionalistas derechistas, como ‘Patriotas europeos contra la islamización de occidente’, en Alemania, ‘Partido por la Independencia del Reino Unido’, de Nigel Farage, y el ‘Frente Nacional’, de Marine Le Pen, en Francia. Estos partidos políticos anti-UE son también partidos políticos anti inmigrantes y anti refugiados.
La última encuesta francesa muestra que, como resultado de la crisis de los refugiados de las guerras de Washington, Marine Le Pen ha llegado a la cima de los candidatos para las próximas elecciones presidenciales francesas.