150.000 personas desaparecidas, más de 2.000 fosas comunes dispersas por todo el Estado español y unos 30.000 niños robados. Estas son las cifras que una veintena de asociaciones de víctimas del franquismo presentaron ayer en la Eurocámara en el marco de una iniciativa para que la Comisión de Peticiones de esta institución se implique y presione al Gobierno del PP en la creación de una Comisión de la Verdad.
Denuncian que España es el único país europeo que no ha hecho una revisión histórica de lo ocurrido, donde la Ley de Amnistía fue utilizada como una autoamnistía para los verdugos y donde las víctimas de un episodio tan negro como el franquismo siguen siendo de segunda categoría.
De ahí que pidieron a la clase política europea que "deje de mirar hacia otro lado" porque el franquismo, como lo fue el nazismo, también es un problema europeo. "Fue un genocidio fascista equiparable al genocidio nazi", advirtió Luis Naranjo, director general de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía, único representante institucional que apoyó ayer la petición, además de media docena de eurodiputados -entre ellos Izaskun Bilbao (PNV) e Iñaki Irazabalbeitia (Aralar)-, quienes recogieron el sentir de las víctimas en una declaración donde exigen también la creación de una comisión.
"Europa tiene una deuda con España. Quiero recordar que fuimos bombardeados en Gernika, en Madrid, en Alicante... Eran aviones italianos y alemanes. Pedimos ayuda pero también que Europa responda a la situación", demandó Julián Rebollo, de la plataforma contra la impunidad del franquismo. Testimonios como éste se repitieron en una sesión en la que denunciaron el olvido y la frialdad del que son objeto por parte de las autoridades españolas.
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