La respuesta del gobierno español contra la protesta ha sido la represión contra los manifestantes
El gobierno venezolano rechazó de plano las desafortunadas declaraciones del ministro de asuntos exteriores español García Margallo, en las que declaró falsamente que el gobierno español había suspendido su de venta de material antidisturbios a Venezuela.
En efecto, hace unas fechas el periódico socialdemócrata "El País" incluía entre sus artículos una información que con grandes titulares aseguraba que el gobierno de Rajoy "habia suspendido la venta de material antidisturbios al Gobierno venezolano”. En esa información añadía que “se trataba de una medida unilateral que el gobierno español ha tomado por un tiempo indefinido. Desde principios de febrero, Venezuela vive una espiral de violencia que ha dejado 39 muertos”.
De manera fulminante el Ejecutivo venezolano desmintió tal afirmación comunicando que “los cuerpos de seguridad del Estado venezolano no poseen ningún contrato vigente de suministros de equipos de seguridad por parte del Gobierno Español o empresas españolas”.
En su comunicado oficial el gobierno venezolano al mismo tiempo que rechazaba categóricamente las declaraciones del canciller español José Manuel García Margallo, manifestaba que el "gobierno español no tenía la autoridad moral alguna para aconsejar sobre violencia y diálogo, cuando el mundo ha sido testigo de cómo el pueblo español se ha levantado en protesta por las políticas excluyentes y negadoras de los Derechos Humanos y la respuesta de ese gobierno ha sido, la represión contra los manifestantes”.
El comunicado del gobierno bolivariano decía textualmente:
La República Bolivariana de Venezuela, frente a la decisión del Gobierno Español de suspender la venta de equipos anti disturbios para Venezuela bajo el supuesto argumento de la inestabilidad social y política del país, aclara que los cuerpos de seguridad del Estado venezolano no poseen ningún contrato vigente de suministros de equipos de seguridad por parte del Gobierno Español o empresas españolas.
El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela reitera su obligación constitucional de mantener el orden interno, la estabilidad política, la paz y los derechos humanos de todos los venezolanos y la defensa de las instituciones democráticas a través del uso legal, proporcional y diferenciado de la fuerza pública frente a la acción de grupos opositores antidemocráticos, que han ejercido la violencia armada contra la ciudadanía y contra la autoridad pública, que además han generado la destrucción y quema de universidades, centros de salud, unidades de transporte público y otras servicios públicos impidiéndole al pueblo venezolano sus derechos constitucionales a la salud, la educación y al libre tránsito.
El Pueblo y el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela rechazan categóricamente las infortunadas declaraciones del canciller español José Manuel García Margallo, cuyo gobierno no tiene la autoridad moral para aconsejar sobre violencia y diálogo, cuando el mundo ha sido testigo de cómo el pueblo español se ha levantado en protesta por las políticas excluyentes y negadoras de los Derechos Humanos y la respuesta de ese gobierno ha sido, la represión contra los manifestantes que no han pretendido derrocar el gobierno español sino reclamar justicia social.
El desacertado canciller español debería recomendar al jefe de su gobierno promover el diálogo con los distintos sectores sociales y nacionales que reclaman justicia en España, como lo ha hecho el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, que por medio de la Conferencia Nacional de Paz ha convocado el diálogo con todos los venezolanos.
Manifestamos respeto y solidaridad con el aguerrido Pueblo Español en la lucha por los derechos civiles, políticos, económicos y sociales.
Caracas, 06 de abril de 2014
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