La indiferencia ciudadana respecto a la campaña de las elecciones europeas del próximo 25 de mayo lo congela todo: las crónicas de los compañeros que se afanan en contarnos las pintorescas Andanzas de Valenciano y Cañete por la España de Tribulete, los índices de audiencia de las teles durante los supuestos debates, los cronómetros de los telediarios, el debate polítco, el IPC… Todo, congelao .
La CGT también ha emprendido una campaña, pero no por la participación, sino por la abstención activa. “Abstenerse el 25 de mayo -dicen- es el mejor referéndum para que las personas expresen su desacuerdo con este sistema social y político”. “El 25M, gane quien gane, ganará la banca y las multinacionales y seguirá gobernando la troika”, añaden. “CGT -rematan en el último sumario- considera que la autoorganización y la lucha en la calle es la mejor garantía que tienen las personas trabajadoras para la defensa efectiva de sus intereses”.
Y en esas andamos, en vísperas electorales y ante tan poderoso caballero, Don Dinero, muertos de frío... congelaos… ¿Por qué me vuelve a invadir la sensación de que los del otro lado de la trinchera, los que siempre van a votar después de misa, lo tienen todo mucho mejor organizado?
Los sindicatos mayoritarios también andan un poco así. Llaman a votar para decidir y dicen que estas elecciones son muy importantes para cambiar las cosas, pero ni CCOO ni UGT han convocado a sus órganos de dirección para aprobar una resolución específica respecto a las europeas.
El caso es que sus secretarios generales -y otros miembros de sus direcciones- se encuentran en el III Congreso de la CSI (Confederación Sindical Internacional), que se está celebrando estos días en Berlín, pero eso ya lo sabían de antes.
Logo de la CES para las elecciones europeas. / etuc.org
No es por ir contra unos o, por favorecer a otros. Después de suficientes años en compañía de nuestros convecinos, tengo claro que obtenerse da poco juego al que lo practica y fortalece al que se lo lleva. Es muy desagradable sentir, ver y sufrir como la abstención engorda a los Don Cañete y sus yogures, tanto como a la Valenciano y sus misticismos, y podemos continuar hasta la extenuación desértica. Pero votar, votar a los otros, esos que dan el cante y la cantan, entiendo que puede ser el canal a seguir. Hay partidos, asociaciones y coaliciones, que juegan en el espacio que toca jugar. Pues, oyes, darles el voto, entiendo que tiene buen horizonte… y sobre todo ese voto no se lo quedaran los Ppsoes y demás oes! Es un punto de vista. Hay otros.
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