lunes, 19 de mayo de 2014

"Los que se enriquecen a costa de infringir la ley, cuanto antes mueran, mejor"

Portada de El Jueves sobre los delincuentes que
nos gobiernan

El jueves 15 mayo el escritor Antonio Gala tituló  Los infames su sección La tronera en el diario El Mundo.
Si hay una causa de odio en mí procuro siempre eliminarla. Sin embargo, comprendo que la que me lo provoca con mayor abundancia es la de quien procura enriquecerse a costa de infringir la ley y usarla contra los otros.
Añade:
Es extraño que, ahora, cada día no me produzca el retortijón de una posibilidad negativa en mis sentimientos. Gentuza, alta o baja, que sale y entra de las cárceles; que nunca hace nada a favor de nadie; que se dedica a afinar sus formas de robar a sus vecinos, o a sus compatriotas, a todo el que se le pone al alcance de sus manos ladronas.
Y concluye:
Me refiero a quienes, por ejemplo, consiguen con trampa la adjudicación de una obra pública, y a continuación falsean los precios de su costo para enriquecerse robando al bien común. A los hipócritas, tan frecuentes en circunstancias como las de hoy y entre los españoles (?) de hoy, les negaría sin dudarlo la nacionalidad muy poco antes de tirarlos al mar. Casos como algunos, en los que ahora pienso, son un lastre para la convivencia, no digo ya para el progreso común y la común ventura. Cuanto antes mueran, mejor. Y cuanto antes desaparezcan los que los benefician, antes alcanzaremos la España verdadera. Porque de España hablo. Y sabéis ya a quiénes me refiero.
¿Qué más se puede añadir a las palabras de Antonio Gala? Al fin y al cabo, son la expresión de los sentimientos de una gran parte de la población que está más que harta de la panda de ladrones y mafiosos que nos gobiernan y que están condenando a la miseria a millones de ciudadanos. Estós "infames"; como los llama Gala, además se dedican a perseguir los comentarios en las redes sociales que aplauden o justifican la justicia espontanea o casual en un país donde los delincuentes contralan también el poder judicial.

Así que, y aunque es evidente que, aunque de vez en cuando mueran o sean asesinados, siempre habrá granujas y sanguijuelas que vivan robando a los que trabajan mientras no acabemos definitivamente con el sistema capitalista, ya tenga este maquillaje democrático o sea sinceramente fascista, Antonio Gala tiene toda la razón cuando dice que:

No hay comentarios:

Publicar un comentario