Aitor Martínez (Laudio, 1988) escribe habitualmente en el portal Topatu.info y es uno de los 21 tuiteros arrestados este martes por la Guardia Civil.
Genéricamente se les acusa de «enaltecimiento del terrorismo», aunque a él nadie le especificó nada sobre imputaciones concretas a su paso por el cuartel del Instituto Armado en Gasteiz, donde permaneció doce horas. Allí, en la celda, desvirtualizó a algún arrestado a quien solo conocía por Twitter. Ahora tiene claro que el objetivo era amedrentar al mayor número de gente posible.
¿Cómo fue la detención?Iba hacia Donostia, a la universidad, y en Bilbo, en el Termibus, se me acercaron dos hombres. Me pidieron indentificarme y, para cuando iba a sacar el DNI, me preguntaron el nombre, les dije que era Aitor y no hizo falta ni sacarlo. Me cogieron y me dijeron que les acompañara. Yo les pregunté por qué, ya que no me enseñaron ninguna placa y me tuve que creer lo que me decían, que eran guardias civiles. Me dijeron que o iba por las buenas o me ponían los grilletes y me llevaban por la fuerza. Estuve en una esquina en Termibus hasta que llegó un coche donde me montaron. De ahí fui conducido a Gasteiz. Luego nos dimos cuenta de que por el camino, cuando el aita me llevaba a Bilbo, habíamos tenido una patrulla de guardias civiles molestando en el peaje, por lo que igual estaban haciendo tiempo.
Una vez en Gasteiz, ¿qué ocurrió?
Por el camino me leyeron los derechos, me dijeron que era un delito de enaltecimiento del terrorismo pero yo no sabía en qué se basaba. Bueno, hasta el día de hoy tampoco puedo saber en qué. Cuando me llevaron a comisaría y me metieron en un despacho en donde ponía «delitos informáticos» llegué a la conclusión de que era por Internet. Pero no se nada más. Se dice, en prensa, que por hechos relacionados con Twitter, por Facebook. No obstante, según informaciones que me han llegado, la Policía ya tendría una ficha en la que decía que soy militante del MLNV y que escribo en una web, que supongo que será Topatu.info. Creo que han intentado disfrazar todo de esta manera y que me podrán encontrar un «ongi etorri» tal cual. Sin embargo, parten desde la base de que yo soy culpable desde el primer momento. Me han
señalado y tratarán ahora de buscar las pruebas convenientes.
¿Le hicieron referencia a tuits o mensajes concretos?
No me mencionaron nada de Twitter, de Facebook ni de nada. La única que lo hizo fue la abogada de oficio, que a lo único que se dedicó desde que llegó fue a criticarme y juzgarme. No dio por buena en ningún momento la presunción de inocencia. Me dijo que estaba allí porque habría liado alguna directamente. Empezó a preguntarme si había puesto algún anagrama de ETA. Le dije que no, así que me respondió que habría puesto algún Arrano Beltza o algún símbolo a favor de la Amnistía. Ahí es cuando entras en un mundo de surrealismo en el que no sabes ni cómo responder. Como anécdota, había delante mío una chica gallega que decía que ella lo único que había hecho era ir al Aberri Eguna del año pasado. En ese momento le preguntaron por la camiseta que llevaba puesta y ella le dijo que era del Aberri Eguna de aquel año. «Ah, será por eso», fue la respuesta. Nos tenían señalados por el hecho de ser vascos, por política directamente. Y en su caso, supongo que por solidarizarse.
¿Ha visto el vídeo propagandístico difundido por la Guardia Civil?
A todos nos ha sonado a lo mismo. Nuestros nombres son públicos y, de repente, tapan los autores de esos tuits. Yo tampoco quiero aventurarme demasiado, pero de los que estaban alrededor mío, ninguno ha escrito esos tuits. Además, en la mayoría de ellos aparecía la misma
foto, era la misma persona. De ese modo, puedes llegar a pensar que lo ha escrito alguien a quien no han pillado o que lo han escrito los propios policías. Incluso en la forma de expresarse… no sé de dónde se lo han sacado.
¿Qué cree que es lo que buscan la Guardia Civil y la Audiencia Nacional?
Creo que había unos perfiles muy concretos. Aitor Cuervo, por ejemplo, es muy conocido. A muchos de nosotros, con los antecedentes que tiene la Justicia española, no necesita ni buscarnos tuits ni nada para criminalizarnos. Lo que se busca es difundir el miedo a la mayor parte de gente posible. Por eso los perfiles son tan diversos, para que la gente se sienta identificada con lo hecho por este o aquel y amedrentar a la mayor parte de gente posible.
También han recibido mucha solidaridad en la red.
Mucha gente se ha sumado, de todas partes del Estado. Esto demuestra que hay movimiento, que la gente está activa y que pocos, al menos en Euskal Herria, se tragan esta farsa. Por eso, cuando me preguntan por cómo he llevado esto, respondo que orgulloso, en todo lo que contribuya a desmontar este montaje. Por desgracia es algo que va a seguir ocurriendo y a lo que hay que estar preparado.
http://www.naiz.info/es/actualidad/noticia/20140429/buscan-difundir-el-miedo-a-la-mayor-parte-de-gente-posible